“ES COMO COGER UNA FOTO DEL ÁLBUM DE TU ABUELA Y HACER UNA PELI DE CIENCIA FICCIÓN”. Palabra de guionista, frase de Chema García Ibarra, al que agradecemos que haya definido su cine porque existían incógnitas para su catalogación; pero, abrazamos la renovación del esoterismo popular.
El pasado jueves 19 de mayo, se proyectó en la sesión post-pandémica de Palabra de Guionista, el nuevo largometraje de Chema García Ibarra "Espíritu Sagrado" (nuevamente utilizando su vocabulario cinematográfico), una asimilación por acopio de contrastes inesperada. En comparación con su primer largometraje, Protoparticulas (2009) más bien situado en la línea sci-fi de los cincuenta, ha sufrido una remodelación estética impactante, inspirada en los noventa con todo el costumbrismo supersticioso que ello conlleva, en todas sus facetas, incluyendo la cómica.
“Pero lo importante no es la temática, es la fe”.
Un usuario del Filmaffinity, le puso un 7. Sin desvelar detalles, puesto que no extrañaría su próxima tele-transmisión por alguna de las entidades colaboradoras, aqui la realidad supera la ficción, al igual que la estética al más puro estilo Wes Anderson, la trama narrativa; resultando bastante empática, tanto por sus actores amateur como la temática a tratar, este fanatismo de lo paranormal; además, en el caso español, abarca lo suficiente como para desarrollarse de forma compleja. Sumándose una yincana simbológica de por medio. Pero volvemos a lo dicho en un principio, se valora que una producción española no gire en torno a una cuestión de relación amorosa y se haya hecho algo -por fin- transcendental.
Finalmente gracias a Chema García Ibarra por compartir sus ideas post créditos como en este proyecto; ha creado expectación con su nuevo estudio psicológico sobre los coleccionistas de latas isotónicas, y sobre todo el reconocimiento al protagonista por su gran trabajo.
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